En su intervención ante el Consejo de Ministros de Exteriores de la Unión Europea en Luxemburgo, la ministra española de Asuntos Exteriores, Trinidad Jiménez declaró a favor de que se envíe una señal positiva a Cuba. La "posición común" de la Unión Europea sobre Cuba "ha quedado superada" con la decisión comunitaria de establecer contactos políticos con La Habana para explorar un nuevo marco de relación.
La "posición común" vigente desde 1996, condiciona la normalización de las relaciones entre Estados Unidos y Cuba y los progresos relacionados a los derechos humanos y la democratización en la isla.
Algunos ministros valoran como gestos positivos la reciente liberación de los presos políticos y la aprobación de reformas económicas para fomentar las inversiones privadas y han comenzado a explorar posibles formas de avanzar en una relación bilateral y de igual manera, apoyar los cambios hacia la democratización.
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