Washington, 13 de diciembre.— El Congreso de Estados Unidos analiza un proyecto de ley que restringiría nuevamente los viajes de estadounidenses y cubanoamericanos, así como el envío de remesas a Cuba.
La iniciativa, patrocinada por el representante republicano por el estado de Florida, Mario Díaz-Balart, se incluye como parte de la ley de presupuesto federal para el 2012, actualmente sometida a discusión en la Cámara de Representantes, destacó el diario Chicago Tribune.
La medida pretende reinstaurar las restricciones aprobadas durante la administración de George W. Bush, como un solo viaje cada tres años para los cubanoamericanos por razones de "reunificación familiar" y un límite de 1 200 dólares anuales por concepto de remesas.
Quedaría anulado asimismo el supuesto relajamiento de las sanciones aprobado por el presidente Barack Obama en enero último, favorables a propiciar viajes académicos, religiosos, culturales o deportivos, si cumplen lo que la Oficina Oval denomina "promoción del contacto persona a persona".
La legislación integra un proyecto de ley presupuestaria apremiante para el país, el cual tiene grandes posibilidades de ser avalado por ambas cámaras del Legislativo antes del 16 de diciembre, señalaron fuentes en el Congreso.
El representante demócrata por Nueva York, José E. Serrano, opositor a cualquier tipo de sanciones contra Cuba, aseguró que busca crear un consenso en la Cámara Baja a fin de detener la propuesta, acotó el rotativo.
Las agresiones legislativas e institucionales provenientes de Washington contra La Habana se han incrementado.
En octubre pasado, Ileana Ros-Lehtinen, desde la presidencia del Comité de Relaciones Exteriores de la Cámara de Representantes, pidió abiertamente a la secretaria de Estado, Hillary Clinton, "acciones más contundentes contra el gobierno cubano".
Las provocadoras declaraciones de Lehtinen se sumaron a otras que a lo largo del año, con igual tono, provinieron de congresistas considerados como reaccionarios anticubanos: Marco Rubio, Bob Menéndez, David Rivera, Bob Graham y Bill Nelson, entre otros.
Dichos legisladores defienden las posiciones más duras de su gobierno contra Cuba, fundamentalmente en lo referido al reforzamiento del bloqueo económico, el intento de ahogar las finanzas y al sector bancario de la nación caribeña y el freno a la expansión petrolera de la Isla. (PL)
No comments:
Post a Comment